sábado, 23 de julio de 2011

ESCORADO EN TU VIENTRE




Tengo el alma del revés como un calcetín agujereado
siento como el tejido se está deshilachando
y ya no puede contener mi sufrimiento.
Me tiemblan las manos y el cuerpo se arrastra
en busca de un puerto donde encontrar amparo
en busca del regazo que le torne a la vida,
pero la mar castiga mis cuadernas
y mi sentina rebosa bilis y amargura.

Me siento al pairo de la vida,
juguete de las olas del destino
a merced de la furia de los vientos.
Me creí dios y soy un pobre diablo
jugué a curar y soy yo quien fallezco
emponzoñado por mis propios filtros
 envenenado a los que en mi bebieron.

Quiero encallar mi proa en tus arenas
y dejar que los tiempos me desguacen
enterrando mi casco en tu arrecife
y terminar mi viaje escorado en tu vientre.

Hazme un lugar en los islotes de tu pecho
y déjame morir entre los brazos de tu puerto,
no puedo sufrir más ni escampar más sufrimientos
ya no me quedan fuerzas, ya no me queda vida. 

JUANMAROMO

martes, 19 de julio de 2011

EL SENDERO DE TUS MUSLOS


Recorro el sendero de tus muslos
a tientas, como un ciego
vadeando lagunas insondables
océanos de fuego,
volcanes palpitantes y candentes
hirviendo entre mis dedos.


Me arrastro, peregrino de tu cuerpo
surcando tus arenas
en busca del oasis primigenio
donde mana la vida
y hundo mi cabeza entre las aguas
que sanan mis heridas.

Mi lengua juguetea entre tus juncos
como un pez insaciable
que se pierde en los fondos abisales
de tus divina cueva
y bebe del maná que en tus entrañas
los dioses atesoran.

Cuando desnudo entrego en tus abismos
mis últimos suspiros,
el cosmos eclosiona y me desborda
en un mar infinito
donde muero y renazco de tu magma
como si fuera un niño.

Juanmaromo





viernes, 8 de julio de 2011

YUGO DE AMOR



Me duele el corazón de tanto sentimiento,
golpea contra las rejas de mis miedos,
intenta elevarse, más ya no tiene alas.

Le arrancaron las plumas una a una,
le cargaron cadenas,
le negaron el agua de tus besos
el pan de tu mirada,
y ahora agoniza desolado
sacudiendo mi cuerpo.

Tómalo entre tus manos
y mécelo en tus brazos
dale asilo en tu pecho enamorado
y deja que se funda con el tuyo
en un pálpito eterno
en un yugo de amor para sembrar la tierra,
en un beso infinito como el tiempo.

Juanmaromo