LA RUTINA

RUTINA

La rutina es una soga,
una droga pura y dura
que nos atrofia la alas
y nos arranca las plumas
que nos hace sus esclavos,
no roba la libertad,
nos encadena a sus miedos,
y nos impide volar,
viajar hacia nuevos mundos,
vivir, crear y soñar,
seguir haciendo camino
más allá del horizonte
sin metas, sin más destino
que ser feliz y exultante,
nos condena al ostracismo,
a hacer girar una noria
más estéril que un desierto
como jamelgos de carga,
nos hace viejos gruñones
sin sueños, sin esperanzas
al pairo de la corriente,
de esa mortal catarata
en que nos arrastra al abismo,
al vacío y a la nada.
 
Vuelve a reescribir tu agenda
a la luz de las estrellas
y que La Polar te guie
a esa Ítaca soñada
que fue tu hogar y tu patria
tu corona y tu bandera
donde Penélope espera
acariciando su arpa
a verte tensar el arco,
a verte empuñar tus flechas,
a que retomes el trono,
y nunca más languidezcas.

DIARIO

DIARIO

 Las hojas de mi diario
llenas están de borrones
de faltas y tachaduras
de enmiendas y borradores,
las hojas de mi diario 
están escritas con sangre
con lágrimas y con risas
con poemas y canciones,
tiene sus hojas heridas
de miedos y desengaños,
de falacias y mentiras,
de proyectos descartados,
pero yo sigo escribiendo
día a día y noche a noche
porque no pido una tregua,
no quiero hojas en blanco,
cuido mi caligrafía,
escribo con más cuidado,
mejoro mi ortografía
y evito dar un mal paso,

que cada página nueva
sea una obra de arte
un horizonte, un poema,
un lugar donde abrazarte
que puedas leer conmigo
sin llorar, sin enojarte,
donde bailar sin orquesta,
donde cantar a dos voces
el aria de una tragedia,
-dueto molto vivace-
sin director y sin coros
sin nadie que desentone,
donde escribir mano a mano,
día a día, noche a noche
una odisea, una biblia
sin demonios y sin dioses;
solos tú y yo caminando
más allá del horizonte.

MIENTRAS ME QUEDE EL ALIENTO

MIENTRAS ME QUEDE EL ALIENTO

 

Me pides que abra mis versos
a la vida y al amor
que vuelva a escribir mis rimas
cual canto de ruiseñor
que sean música, odas,
clarines a un tiempo nuevo
en que reine la justicia
la paz, la cultura, el reto
de ser un poco mejores,
más humanos, más sinceros.

Me pides que alce mi canto,
que mi voz abra los cielos
a la paz, a la esperanza
barriendo nubes de fuego,
pero apenas tengo fuerzas,
apenas en pie me tengo
luchando contra molinos,
bancos, ejércitos, credos
que nos hablan de justicia
y nos hacen sus esclavos,
religiones homicidas
que fomentan odio y miedo,
políticos mercenarios,
sacerdotes del averno
que nos venden indulgencias,
pasaportes a un infierno
en que pretenden sumirnos
diciendo que es necesario,
que hemos de pagar peaje,
tragar los telediarios
leer la prensa diaria
como si fuera un breviario,

pero conmigo, no cuenten
tengo que seguir luchando,
denunciar sus tropelías
desmantelar sus engaños,
no se si hay otra vida
pero esta, la defiendo
con garras uñas y dientes
mientras me quede el aliento,

¡MAÑANA SERÁ OTRO DIA!

¡MAÑANA SERÁ OTRO DÍA!

 Apenas me quedan sueños
y se me escapan los días,
las letras y las palabras
se ocultan y desvarían, 
le roban tiempo a mi tiempo
y emborronan mis cuartillas.

Apenas queda esperanza;
guerras, pandemias, sequia,
crisis, violencia, cansancio
quieren amargar mis días, 
quieren lavarme el cerebro,
quieren borrar mi sonrisa,
hacer de mi un pobre viejo
cascarrabias y egoísta.

Pero aun tengo a mi esposa,
los brazos que me cobijan
los besos que aún me encienden
la pasión y la sonrisa
y por mucho que los miedos
golpeen en mis ventanas
que los temores me asedien
para amargarme la vida
seguiré siendo yo mismo
cantor, poeta, cuentista
amante de la belleza
soñador y sibarita
un fan de la buena mesa
sommelier de mil bodegas
peregrino del futuro
en busca de la utopía

navegando viento en popa,

remando si hay calma chicha
y si hoy no me quedan fuerzas
¡mañana será otro día!