soñamos con los ojos abiertos
corremos desplegando las alas
volamos pateando los vientos”.
Somos aurora y tiniebla
ocaso y amanecer
nacemos mientras morimos
y morimos al nacer.
Carne, espíritu y fuego
agua, pecado y virtud
océanos y desiertos
ciegos buscando la luz.
Cuando el amor nos arrastra
con el poder de un ciclón
el alma se purifica
y hasta creemos en dios.
Es un nuevo nacimiento
es un parto sin dolor
aunque el dolor, sin dudarlo,
sea el envés del amor.
Piel a piel y beso a beso,
gozo, placer y temor.
vamos sembrando los campos
vamos alzando la voz,
hasta escuchar como el eco
repite nuestra canción
y hace mas dulce el camino,
sangre, sonrisa y sudor
Lo que somos, lo fuimos,
lo que quisiéramos ser
son facetas de un diamante
mas duro que el pedernal
mas volátil que el rocío,
tan frágil como el cristal.
Sólo el amor sobrevive
al tiempo y la adversidad
a la muerte, al desengaño
al miedo, a la enfermedad
a la rutina, al recuerdo
al tedio y al mas allá,
