jueves, 17 de julio de 2025

NO HAY NADA QUE ME DETENGA

 

Se está secando mi fuente,
se está agostando mi trigo,
las tinieblas amenazan
con apagar mis sentidos,
es un goteo acuciante,
un aquelarre sombrío,
un Finisterre brumoso,
un pasaporte al vacío.
 
Los proyectos agonizan,
los recuerdos se emancipan
los miedos aúllan furiosos,
la soledad me esclaviza,
¡que lejos quedan los años
en que el amor era eterno!
en que su música hervía
espumeando en el pecho,
en que el mañana era un sueño,
en que el espacio y el tiempo
eran un ballet gozoso
entre la tierra y los cielos
 
Pero no podrán conmigo,
tengo sueños y proyectos,
escribo, canto y aun siento
el amor dentro del pecho
hervir, cuando entre mis brazos
siento a mi esposa vibrando
de amor, pasión y ternura,
cuando el péndulo de cronos
se detiene entre sus senos
y yo me hundo en sus aguas
profundas como los tiempos
¡no hay nada que me detenga
si el amor brilla en mi cielo!
que el mañana es otra vida
y esa yo no me la pierdo

 

MUSAS ENCELADAS

 

Las palabras se retuercen

como sierpes venenosas

mientras me muestran sus fauces

amenazantes, furiosas,

escupen en mis cuartillas

esparciendo su ponzoña,

buscando una nueva presa

a quien sumir en la angustia,

a quien reabrir las heridas 

que ya creía cerradas.

 Me miran desafiantes

mientras su bífida lengua

silva buscando una presa

a quien contagiar su rabia

blandiendo sus cascabeles

como fieras cimitarras

y mostrando sus colmillos

como arpías tenebrosas,

mas no les seguiré el juego,

machacaré sus cabezas,

saldré a pasear cantando

y tomaré unas cervezas,

mañana será otro día

otro paisaje, otra era

hoy las musas enceladas

me han declarado la guerra

pero la tienen perdida

¡la poesía es mi tierra!