Es profundo y amargo
el dolor de un amigo
es un vino picado
que te roba el sentido,
es un vómito ardiente
que te abrasa la entraña
un cilicio acerado
que se clava en el alma
La impotencia te muerde
como un perro rabioso
mientras ves la tristeza
arrasando sus ojos
mientras sientes su pena,
te amordaza el silencio
y las manos te tiemblan
y te crujen los huesos.
Es profundo y amargo
el dolor de un amigo
cuanta veces quisieras
intentar compartirlo
pero el está solo
y se encierra en si mismo
y te cierra la puerta
y te arroja al abismo
Solamente te queda
esperar su regreso
y beberte su ausencia
y apurar los recuerdos,
ignorar los desprecios
arañar sus silencios
con las uñas del alma
en los muros del tiempo.
JUANMAROMO
2 comentarios:
Creo que todos podríamos suscribir esta entrada en algún momento de nuestras vidas.
Quizás incluso hayamos sido ese amigo que está pasándolo mal y que se encierra en sí mismos. Creo que a todos nos cuesta reconocer que tenemos un problema, quizás porque al igual que a ti te preocupa que tu amigo esté sufriendo, a él le preocupa que tú puedas sufrir si te cuenta lo que le pasa...
Es todo un bucle muy complicado que sólo la amistad puede explicar.
Supongo que queda esperar que se pasen las malas rachas, habrá que seguir dando todo el apoyo mientras, aunque sea desde las sombras.
Un saludo.
Oski
Lo malo es cuando los llamados amigos desaparecen cuando te ven con problemas....
Un biquiño y preciosa entrada.
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